Tristemente el grupo se separa,
recordar que este viaje fue en Miami, ni más ni menos que en febrero, pero
hijos la vida no me da para más. Nos quedamos por un lado el Cayaso team
compuesto por Rahulito, Cris, Alf, Miqueas y yo.
La primera excursión que hicimos
fue ir a ver los Everglades, un humedal subtrópico en el que habitan gran
variedad de animales y plantas autóctonos de la zona, como es uno de los
arbustos más curiosos, los manglares. Estos tienen las raíces muuuy largas,
tanto que lo que es la copa y las hojas no salen hasta que las raíces no están
por encima del agua lo que ayuda a la protección de las costas y la erosión,
además de servir de casita para muchos animalillos.
¡Pero en realidad no íbamos a ver
los Manglares si no ALIGATORES!, y qué es eso os preguntareis. Pues ni mas ni
menos que Caimanes.
La primera parte que visitamos de
este National Park fue el Shark Valley (ni idea de donde viene lo de Shark, ya
que allí sólo había culebras, pájaros y aligátores (Caimanes).
En esta primera parada compramos
unas entradas al trenecito que nos hacia la visita guiada, ya que si
alquilábamos bicis nos podía dar una insolación. En este tour nos fueron
explicando la formación de los manglares, la fauna y la flora autóctona y por
qué les hace tan especial.
Ojo al spanish level |
Uno de los datos más curiosos que
nos contaron y que jamás se nos olvidará, es de donde viene la palabra
Aligator, os pongo en situación. 4 españoles 1 hindú y el resto de tren
americano y chino. El guía, que se había percatado de que en ese tren había
españoles preguntó: ¿Cómo se dice Lizard en español? A lo que contestamos los
españoles y Rahul (fue el único que levantó la mano) LAGARTO.
El guía animó a todo el tren a que dijese rápidamente y 5 veces LAGRARTO LAGRARTO…. Así es, más difícil no o podía haber dicho. Y finmente concluyó con aire de satisfacción dijo y de ahí viene Aligator. (Imaginaos la cara de los españoles…).
El guía animó a todo el tren a que dijese rápidamente y 5 veces LAGRARTO LAGRARTO…. Así es, más difícil no o podía haber dicho. Y finmente concluyó con aire de satisfacción dijo y de ahí viene Aligator. (Imaginaos la cara de los españoles…).
La parada top fue en Observation
Tower, una torre desde la que se avistaba un gran manglar formado en el Shark
River (supongo que antes habría tiburones) y caimanes enormes que parecían
estatuas.
De camino al coche vimos caimanes
del tamaño de la palma siguiendo a su mamá y un montón de pájaros muy curiosos.
Next stop: Long Pine Key, aquí
hicimos tres rutillas de 10 minutillos cada una, se llamaban Pinelands (pequeño
recorrido en el que caminas sobre la laguna y puedes observar las familias de
caimanes nadando como pececillos), Pa-Hay-Okee, Royal Palm (si te quieres
sentir como Tarzán colgándote en las lianas, sin duda este es sitio en el que
puedes colgarte e intentar saltar de una a otra).
Mientras hacíamos el primero de
estos recorridos nos encontramos con un grupo de chicas, no sabemos muy bien si
eran alemanas o americanas, a las que les pedimos si podían hacernos alguna
foto. Lo bueno fue que nos las fuimos encontrando a lo largo de todo el día en
los distintos puntos, por lo que conseguimos un book fotográfico de grupo muy
chulas, incluyendo el momento flatulencia.
Tras estos breves recorridos
fuimos a parar al último observation point, con una rutilla más larga por
encima de los manglares, viendo ahora ya pájaros, porque los aligatores no se
dejaban ver mucho en esta zona. Estamos ya en Flamingo Visitor Center, la ruta
que hay allí es la de Eco Pond (todas las rutas que hicimos eran rutas interpretativas,
donde teníamos los típicos cartelitos que nos explicaban cosas, pero tampoco
les hicimos mucho caso) en este último tramo vimos Pelicanos y Egrets (Garzas).
Aún era pronto cuando acabamos
así que nos fuimos de caminito a nuestra casaza en los cayos, concretamente en
Islamorada.
Cayos
Conducir por la carretera de los
cayos es algo de lo más espectacular, imaginaos, aguas cristalinas, una carretera en medio y
una fila de 1700 islas. Y tú vas por
encima avistado a lo lejos el siguiente paraíso con tierra y a los lados unas
grandes piscinas de agua azul turquesa con una arena blanca en la que tan
apenas te cubría las piernas enteras.
El recorrido hasta llegar a
nuestra humilde morada costó solo hora y media. Llegar hasta la isla más alejada
cuesta tres horas que se pasan volando ya que el paisaje es espectacular.
El coche iba amenizado por música
y cantantes de primera categoría, cuando a los componentes les entró el
gusanillo de salir para mantener el ritmo de fiesta que llevábamos llevando en Miami.
Pero antes de salir bien teníamos
que comprar para poder sobrevivir. Compramos de todo para hacer, pasta (que la
hicimos en el microondas porque no teníamos vitro), vegetales y carne para bbq
y un desayuno supercompleto. La compra fue de lo más barato teniendo en cuenta
que nos “regalaron” una caja de muchas coronitas.
Al llegar a la casa vimos que el
interior dejaba que desear, una cama se hundía por el centro y colocamos una
cantimplora para poder tener una pata central, pero el exterior era una pasada,
no cuento, pongo foto.
En ese ambiente preparamos una
bbq de lo más mejor, tras conocer y pedirle a los dueños (que vivían arriba)
material de cocina ya que junto con la vitro brillaba por su ausencia.
Mientras unos se bañaban en nuestro canal privado, Alf y yo discutíamos sobre como hacer la mejor bbq (siempre desde el cariño of course).
Mientras unos se bañaban en nuestro canal privado, Alf y yo discutíamos sobre como hacer la mejor bbq (siempre desde el cariño of course).
Ya que todo nos quedaba lejos,
decidimos cenar y chilear en nuestro outdoor. Nos pusimos morados y Rahulito aprovechaba
a comer toda la carne posible ya que su madre no lo veía (culturalmente el es
vegetariano, le descubrimos el maravilloso mundo carnívoro).
Sin más nos fuimos a dormir, ya
que al día siguiente íbamos a visitar Key West (Cayo Hueso), el ultimo de los
cayos, en el que Heminway recogia inspiración para poder escribir sus novelas.
Mientras Cristina visitaba su
casa, el resto nos íbamos a ver el punto más cercano a Cuba y la playa Ponce de
León (supongo que la llamarán así porque desembarcarían por ahí), ver corretear
las gallinas por la calle y tomarnos una foto con la Milla 0 de la ruta 1.
Tras recoger a Cris, fuimos a
comer a la playa Highd Beach, pero como no tenía mucho interés decidimos ir a
ver la puesta de sol al Fort Zachary Tylor. Un parque con un fuerte en el que
caminas en largas playas de arenas blancas.
Llevábamos colchonetas y donuts
en el coche y justo enfrente de donde estábamos nosotros había unas piedras
tentadoras, quienes me conozcan sabrán que pasó.
Pues sí, fuimos nadando hasta
ellas, Rahul moría de ganas de ir, pero su destreza en el agua estaba en
progreso así que nos lo llevamos tirando del donut para poder disfrutar todos
juntos del silencio y tranquilidad que se respiraba en esas piedras. El sol empezaba
a marcharse, y muchos candrejos (como a mi me gusta llamarlos) no había, así
que con cuidado de las olas nos fuimos de nuevo a la playa a jugar con la cámara.
Y de vuelta para casa, pasábamos
la última noche en los cayos, ha pasado tanto tiempo que ya no recuerdo que
hicimos a la noche, pero seguro que estábamos muertos. Al día siguiente tras ir
a hacer la colada y recoger lo que había sido una morada y no humilde, pusimos
rumbo a la ultima zona costera que íbamos a ver en este viaje.
John Pennekamp Coral Reef State
Park, casi nada el nombre eh, dos playitas visitamos y pasamos el día, por la
mañana una grande en la que te clavabas todo tipo de piedras en los pies, y por
la tarde otra más pequeña en la que podías nadar hacia manglares escondidos, y
donde jugamos a pasar la pelota con unos americanos que se unieron. Y no veáis
como le daban al balón las mujeres.
N.A.S.A
Al día siguiente fuimos a ver el parque de la NASA. Allí nos juntamos con el resto del grupo. Si me he de quedar con algo del parque son las espectaculares reproducciones de cohetes, desde el Rocket al Apolo 11, jamás te esperas que sea taaaan grande. También tienen atracciones con todo tipo de curiosidades del espacio como WC para astronautas, viajes espaciales, atracciones de Marte, la luna. No podía faltar una mascota con la que fotografiarte como puede ser un astronauta.
Al día siguiente fuimos a ver el parque de la NASA. Allí nos juntamos con el resto del grupo. Si me he de quedar con algo del parque son las espectaculares reproducciones de cohetes, desde el Rocket al Apolo 11, jamás te esperas que sea taaaan grande. También tienen atracciones con todo tipo de curiosidades del espacio como WC para astronautas, viajes espaciales, atracciones de Marte, la luna. No podía faltar una mascota con la que fotografiarte como puede ser un astronauta.
La verdad que fue muy interesante
y curioso ver como los americanos reproducen la llegada a la luna y sienten
tanta pasión por los logros de su país. A la vez que tan solo encuentras 3
mujeres astronautas en todo el pasillo de astronautas blancos y varones
americanos.
Aun así, lo mejor fue el tour
para ver desde donde se ejecutan los lanzamientos o launchers de los cohetes en
misiones reales. Sigo alucinando con las dimensiones de los edificios y la ingeniería
que ello abarca.